El risotto de champiñones es una de mis recetas preferidas. Es comida italiana en su mejor expresión, ¿Por qué? El encuentro de sabores es simplemente maravilloso y el queso parmesano es uno de mis favoritos (Todos los quesos son mis favoritos). Lo que sin ninguna duda tiene esta receta es que los champiñones logran crear un umami perfecto, en especial para los días vegetarianos.
Jump to Recipe Print Recipe¿Podrías elevar esta receta a algo vegano? Es muy complicado, pero no diría imposible. He hecho mi buenos tratos y mantequillas de origen vegetal logran crear algo de sabor y cremosidad, el problema hasta ahora es que no he podido encontrar un reemplazo vegano digno de un queso parmesano. No digo que sea imposible, incluso podrías con alguna crema vegetal imitar parte del efecto. El sabor no sería el mismo, pero siempre hay oportunidad de comer cosas diferentes y disfrutar variedad de sabores.
Si tienes alguna curiosidad sobre la historia del risotto, ahí está mi relato. Si estás aburrido de tanta cháchara, acá continúa la receta.
Details
2 servings
15
20
367
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Ingredients
4 champiñones grandes, o 5 medianos.
Una cebolla grande, o dos pequeñas
1/4 de taza de vino blanco
1 taza y ¼ de arroz arborio
150 gr de mantequilla
150 gr de queso parmesano
Aceite de oliva, sal y pimienta
Litro de caldo de verduras
Directions
- Limpiar los champiñones. Este es un proceso delicado porque no quieres empaparlos de agua, lo mejor es usar un papel o toalla húmeda y así quitarle restos de tierra. Remojarlos puede quitarle un poco de su sabor. Elige champiñones frescos
- Rebánalos, lo mejor es que lo hagas conservando su figura de champiñón y no los hagas pedacitos muy pequeños. Cuando los cocines no quieres que se desbaraten o sobre cocinen.
- Separa los champiñones ya que querrás algunos para decorar, al menos ¼ de tu porción final
- Corta la cebolla en cubos pequeños, vas a hacer un sofrito así que mientras más pequeños mejor.
- En un sartén con un poquito de aceite de oliva, cocina los champiñones. Hazlo de tal forma que no queden uno sobre otro, sino todos sobre el sartén al lado de cada uno. Los volteas como si fueran panquecas: uno por uno. Sepáralos y reserva
- En el mismo sartén dónde cocinaste los champiñones, preferiblemente largo con algo de altura, agrega 125 gr de mantequilla y la cebolla. Sofríe a temperatura media por 3 minutos. Remueve ocasionalmente
- Agrega el arroz y sofríe por 2 minutos más. Luego agrega el vino blanco y cocina por al menos 2 minutos. Presta atención a que se evapore el alcohol del vino y remueve constantemente
- Agrega suficiente caldo de verduras para cubrir al ras el arroz. Remueve
- Repite el paso 8, una vez se seque un poco el arroz dos veces
- A la tercera oportunidad agrega poco caldo, los 25 gr restantes de mantequilla y 100 gr de queso parmesano
- . Agrega los champiñones una vez se está secando, exceptuando la porción reservada. Remueve y apaga la cocina
- Sirve un poquito de queso en el plato, agrega el risotto y decora con los champiñones reservados. Puedes agregar sal y pimienta al gusto, también una cucharadita de aceite de oliva. Puedes adornar con más queso y/o cebollín, cilantro o perejil (Queda a tu gusto)
Consejos para el mejor risotto de champiñones
El risotto siempre queda bien a una llama media/alta, no tan alta como para quemar el arroz, pero no tan baja para que se cocine solo con el vapor. Recuerda que es un sofrito.
Es importante que el arroz absorba la grasa y que tenga espacio para interactuar y botar almidón. Este proceso lo hace durante el sofrito y cuando se agrega el vino. Esto se llama tostatura.
No te confíes al agregar el caldo, siempre debe hacerse con la cantidad justa, demasiado caldo cambiará la textura del risotto y no agregar suficiente puede quemarlo.
Yo soy fanática del queso y creo que nunca es poco, en lo que se refiere al risotto. Pero mucha mantequilla y mucho queso puede darte algo con un sabor que ya no es umami. La mantecura es un proceso muy importante y no debes tener de más ni de menos.
El risotto se puede hacer en unos 20 minutos, así que es una comida que necesita atención, ¡No la descuides!